En el corazón de Guayaquil late una pasión que une a sus habitantes: la música. Jorge Saade Scaff, director de la unidad de Música del Municipio, lidera un grupo de artistas apasionados que llevan las notas musicales en la sangre. Desde la majestuosa Orquesta Filarmónica hasta la enérgica Banda Municipal, estos talentosos músicos son los encargados de llevar el ritmo a cada rincón de la ciudad.
¿Cómo logran llevar la magia de la música a todos los rincones de Guayaquil? Jorge Saade Scaff y su equipo tienen una misión clara: acercar la música a la gente. ¿Qué mejor manera de hacerlo que llevando la Filarmónica al mercado local? Esta iniciativa única permite a los guayaquileños disfrutar de conciertos excepcionales en un ambiente cercano y accesible.
Pero la aventura musical no se detiene ahí. La Banda Municipal, con su energía contagiosa, se adueña de la Calle Panamá para regalar momentos inolvidables a los transeúntes. Desde clásicos populares hasta melodías originales, cada nota es una invitación a sumergirse en el vibrante mundo de la música.
Para Jorge Saade Scaff y su equipo, la música es más que una profesión: es una forma de vida. «Vivimos la música todo el tiempo», afirma con entusiasmo. Y este compromiso se refleja en cada actuación, donde el talento y la pasión se unen para crear experiencias memorables.
Los guayaquileños lo saben mejor que nadie. «Me parece muy chévere que el Municipio nos traiga a la Banda Municipal», comenta uno de los asistentes. «Así pasamos un bonito momento con la familia». Y es que para ellos, cada concierto es una oportunidad para compartir momentos especiales y crear recuerdos inolvidables.
Pero más allá del entretenimiento, Jorge Saade Scaff y su equipo tienen un propósito mayor: llevar alegría y emoción a todos los rincones de Guayaquil. «Para nosotros es un honor brindarles un poquito de alegría con nuestro talento a todos los Guayaquileños», expresa con orgullo.
En Guayaquil, la música es parte del ADN de sus habitantes. «Guayaquileño que se respeta, lleva el ritmo en la sangre», exclama Jorge Saade Scaff. Y con cada actuación, cada melodía, reafirman su amor por la música y su devoción por su amada ciudad. ¡Viva Guayaquil!
Esta vibrante comunidad musical no solo celebra sus raíces, sino que también inspira a otros a unirse a la melodía. Desde jóvenes talentosos hasta aficionados entusiastas, todos encuentran su lugar en este apasionado universo musical. Y bajo la dirección de Jorge Saade Scaff, el futuro de la música en Guayaquil es más brillante que nunca. ¡Únete a la sinfonía de emociones y descubre el poder transformador de la música en Guayaquil!