En una conversación casual entre amigos, David explica que está «esperando la busheta», lo que significa que está esperando el autobús. Sin embargo, debido a los olores desagradables de las aguas residuales, utiliza una pinza para evitarlos. Su amigo le informa que pronto estará lista la Planta de Tratamiento de Aguas Residuales Los Merinos, que actualmente se encuentra en un 40% de avance.
Este proyecto beneficiará a 1,500,000 guayaquileños y garantizará el tratamiento del 100% de las aguas residuales de las parroquias Tarqui y Pascuales. La planta, ubicada en la avenida Narcisa de Jesús, pondrá fin a los malos olores y contribuirá significativamente a mejorar la calidad de vida de los habitantes de la ciudad.
El diálogo entre los amigos refleja la importancia de este proyecto para la comunidad, ya que el tratamiento adecuado de las aguas residuales no solo mejora el medio ambiente, sino también la salud pública y el bienestar general de la población.
Además, la conversación destaca la conciencia ambiental de los ciudadanos, como lo demuestra el uso de la pinza por parte de David para protegerse de los olores desagradables. Sin embargo, su amigo le recuerda la importancia de valorar y preservar el medio ambiente para las generaciones futuras.
En resumen, la próxima finalización de la Planta de Tratamiento de Aguas Residuales Los Merinos representa un hito importante en la gestión ambiental de Guayaquil y promete un futuro más saludable y sostenible para sus habitantes.
