En Ecuador, un número significativo de mujeres enfrenta el desafío de las várices, una condición que no solo causa molestias físicas, sino que también genera preocupación por la estética de sus piernas. Sin embargo, la ozonoterapia ha emergido como una opción innovadora y no invasiva para abordar este problema.
Estudios recientes destacan que la ozonoterapia ofrece múltiples beneficios, incluyendo la mejora de la circulación sanguínea y la reducción del dolor e inflamación en pacientes con várices. El Dr. Peeter Jaramillo, fundador de Doctor Ozono y especialista en ozonoterapia con más de 25 años de experiencia, explica: «La ozonoterapia, al mejorar la oxigenación y circulación sanguínea, logra reducir la acumulación de sangre en las venas, disminuyendo así el dolor asociado con las várices. He observado cómo este tratamiento no solo mejora la apariencia, sino también la calidad de vida de las personas, especialmente de las mujeres que lidian con el malestar diario de esta condición.»
Según el Dr. Jaramillo, «este tratamiento ayuda a regenerar los tejidos, facilitando la desinflamación de las venas varicosas y permitiendo que el paciente experimente una mejora significativa después de pocas sesiones.»
Una preocupación global
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud, alrededor del 30% de las mujeres a nivel mundial sufren de várices en algún grado. En Ecuador, la incidencia es notablemente alta, especialmente entre aquellas que llevan un estilo de vida sedentario o pasan largas horas de pie. «Es un problema de salud pública que no solo afecta el bienestar físico, sino también la confianza y autoestima de las mujeres,» añade el Dr. Jaramillo.
La detección temprana es crucial. Se recomienda que las mujeres se realicen exámenes regulares, sobre todo aquellas con antecedentes familiares de várices. Las medidas preventivas incluyen ejercicios regulares, una alimentación saludable y evitar períodos prolongados de pie o sentada.
La ozonoterapia se presenta como una alternativa para quienes buscan un tratamiento seguro, no invasivo y sin necesidad de procedimientos quirúrgicos. «Hoy más que nunca, la salud vascular se puede mejorar con un tratamiento sencillo y natural como el ozono,» concluye el Dr. Jaramillo.
Con el auge de la ozonoterapia, muchas mujeres en Ecuador pueden encontrar alivio a sus molestias y mejorar su calidad de vida, enfrentando las várices con una nueva esperanza.