Guayaquil se alista para el Simulacro Cantonal de Terremoto 2024, un ejercicio masivo de preparación ante situaciones sísmicas que movilizará a más de 139.000 personas en todo el cantón. El evento, organizado por el Municipio de Guayaquil a través de SEGURA EP, se llevará a cabo el próximo 28 de noviembre a las 10:30 AM, con la participación confirmada de 311 instituciones de diversos sectores, tanto públicos como privados.
Ecuador, ubicado en una zona de alta actividad sísmica, ha visto cómo la cultura de prevención ante desastres naturales se ha ido consolidando con el tiempo. En este sentido, el simulacro tiene como objetivo principal reforzar la capacidad de respuesta de la población ante un posible terremoto, al mismo tiempo que promueve la cooperación interinstitucional y fomenta una mayor conciencia sobre la gestión de riesgos sísmicos.
En palabras de Fernando Cornejo, presidente del Directorio de SEGURA EP, la educación y la concientización son cruciales para disminuir la vulnerabilidad de la población ante sismos. “A través de este simulacro, buscamos generar un ambiente propicio para que todos los ciudadanos comprendan la importancia de estar preparados, conocer las rutas de evacuación y los puntos de encuentro seguros”, expresó.
La respuesta ante una emergencia no depende solo de la ciudadanía, sino también de la coordinación eficiente entre diferentes instituciones. En esta edición del simulacro, participarán organismos del holding municipal, como mercados, hospitales, la Metrovía, y la Terminal Terrestre. También se sumarán entidades como el IESS, Petroecuador, el Ministerio de Salud Pública (MSP), Aduanas, la Universidad de Guayaquil, unidades educativas, empresas privadas y comités barriales.
Katherine Villamarín, Gerenta de Gestión de Riesgos de SEGURA EP, destacó la importancia de que los participantes practiquen y refuercen sus habilidades para responder adecuadamente ante una emergencia. “Este simulacro es una oportunidad para mejorar la preparación de todos los actores sociales en un contexto de alto riesgo sísmico”, señaló.
El ejercicio incluirá dos escenarios clave para poner a prueba las capacidades de respuesta ante un terremoto. El primero de ellos será una Evacuación Rápida y Masiva (ERMA), en la que se simulará la evacuación segura y eficaz del Hospital Bicentenario, con un enfoque en la atención prehospitalaria. En el segundo escenario, el equipo Urban Search and Rescue (USAR) del Cuerpo de Bomberos de Guayaquil llevará a cabo simulacros de rescate en una estructura colapsada, demostrando su capacidad para intervenir durante las primeras 36 horas tras un desastre sísmico.
⛑️🦺 Participa en el Simulacro de Terremoto en Guayaquil – 28 de Noviembre de 2024.
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— Segura EP (@segura_ep) October 29, 2024
Polo Terán, Segundo Jefe del Cuerpo de Bomberos de Guayaquil, destacó la importancia de este ejercicio en la preparación y la capacidad de respuesta del equipo ante situaciones críticas. «El simulacro no solo evalúa la capacidad de evacuación, sino también la efectividad de los equipos de rescate en una estructura colapsada, un escenario que pone a prueba la coordinación y la rapidez en las labores de salvamento», explicó.
El Municipio de Guayaquil extiende una invitación a empresas, organizaciones sectoriales, comités barriales y a la comunidad en general para que continúen con las inscripciones hasta el 15 de noviembre. Las personas interesadas pueden acceder a los enlaces publicados en los canales oficiales de la campaña para completar su registro y participar en este importante ejercicio de prevención.
Para inscripciones y más información, los interesados pueden visitar el siguiente enlace:
https://docs.google.com/forms/d/e/1FAIpQLScY0slT5Ssxh16kMX7fN_tN4UWlJsv_znflpNJYBwm_Oz23Bw/viewform
Con este simulacro, Guayaquil refuerza su compromiso con la seguridad de sus ciudadanos frente a un posible terremoto, promoviendo la cultura de la prevención y la cooperación entre sectores públicos y privados. La ciudadanía tiene una oportunidad única de prepararse y familiarizarse con las rutas de evacuación y los protocolos de emergencia, lo cual podría marcar la diferencia en una situación de crisis real.