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Guayaquil se blinda contra los apagones para proteger el suministro de agua

Guayaquil toma medidas decisivas ante la crisis eléctrica con la compra de generadores para estaciones de bombeo, asegurando el suministro de agua potable a pesar de los apagones.

El Municipio de Guayaquil, junto con EMAPAG e Interagua comprarán generadores para estaciones de bombeo en áreas críticas.
El Municipio de Guayaquil, junto con EMAPAG e Interagua comprarán generadores para estaciones de bombeo en áreas críticas.

La Muy Ilustre Municipalidad de Guayaquil, en un esfuerzo conjunto con EMAPAG e Interagua, anunció este jueves 18 de abril de 2024 una medida proactiva frente a la crisis eléctrica que azota al país: la adquisición de generadores para estaciones de bombeo en áreas críticas. Esta decisión surge como una solución a los cortes de agua potable que han afectado principalmente a las zonas elevadas de la ciudad.

El Gerente de EMAPAG, Ing. Mario García, informó durante la reunión del Comité de Operaciones de Emergencias (COE) Cantonal que se comprarán cuatro generadores con una inversión de $250.000 por parte de Interagua, y se alquilarán otros cuatro para asegurar el servicio en las áreas más vulnerables. Estos equipos permitirán que las estaciones de bombeo continúen operativas incluso durante los apagones, garantizando así el abastecimiento de agua potable.

En Guayaquil, de las 60 estaciones de bombeo existentes, 42 son susceptibles a interrupciones del servicio por cortes de luz, y 20 de ellas experimentan cortes inmediatos de agua potable cuando hay apagones. Sectores como Mapasingue, Pancho Jácome, 9 de Enero y Colinas del Hipódromo ya han sufrido estas consecuencias. El tiempo estimado para restablecer el servicio tras un corte puede alcanzar las dos horas.

Sin embargo, el presidente del COE cantonal, Fernando Cornejo, ha transmitido un mensaje de tranquilidad, asegurando que la Corporación Nacional de Electricidad (CNEL) ha confirmado que no se producirán cortes en la Planta de Tratamiento de Agua Potable La Toma, descartando así escenarios críticos que pudieran comprometer el suministro de agua en la ciudad. 

Con estas medidas, Guayaquil se prepara para enfrentar y mitigar los efectos de la emergencia eléctrica, priorizando la continuidad de los servicios esenciales para sus ciudadanos.