La Municipalidad de Guayaquil, a través de EMAPAG-EP, dio inicio a la segunda fase del Plan Choque, un ambicioso proyecto que tiene como objetivo mejorar el drenaje de aguas lluvias en varios sectores críticos de la ciudad. Esta fase incluye un conjunto de 16 obras de infraestructura que beneficiarán a más de 265,000 habitantes en áreas de alto riesgo, especialmente en el noroeste de Guayaquil.
El Plan Choque busca mitigar los efectos de las lluvias durante la temporada invernal, un problema recurrente en muchas zonas de la ciudad que, debido a la falta de un drenaje adecuado, sufren de inundaciones y acumulación de agua. Con una inversión aproximada de $6,7 millones, estas obras mejorarán la capacidad hidráulica de la ciudad, permitiendo una recolección más eficiente de las aguas lluvias.
Los avances en Urdesa Central ya son visibles. Más de 240 metros de conductos cajón han sido instalados en la calle Primera, desde la avenida Otto Arosemena hasta la avenida del Rotarismo, en un esfuerzo conjunto entre Interagua y EMAPAG para proteger al sector de inundaciones… pic.twitter.com/9PUJvT17QI
— Aquiles Alvarez Henriques (@aquilesalvarez) November 13, 2024
La segunda fase del Plan Choque se concentra en áreas vulnerables y de alto riesgo como las cooperativas Ciudad de Dios, Realidad de Dios, Sergio Toral, Julio Cartagena, y Flor de Bastión bloque 4, en el noroeste de Guayaquil. Estas zonas, conocidas por sufrir afectaciones en la temporada de lluvias, verán un alivio significativo con las nuevas obras de infraestructura que se ejecutarán.
Las obras incluyen la construcción de ductos cajón, la estabilización de taludes, así como la repotenciación y mejoramiento del sistema de alcantarillado pluvial, y otras intervenciones complementarias que optimizarán el drenaje en la ciudad.
Uno de los frentes de trabajo actuales se encuentra en Urdesa Central, donde se está instalando un ducto cajón de 370 metros en la calle Primera, entre la Av. Del Rotarismo y la Av. Otto Arosemena. Este ducto tiene como objetivo aliviar una de las zonas más afectadas por las inundaciones, contribuyendo a una evacuación más rápida y eficiente de las aguas lluvias.
Asimismo, se tienen previstas obras en sectores como Sauces 4, 5, 6, 7 y 9, barrios de la Av. Modesto Luque, y el sector Kubiec, que también tendrán mejoras en su sistema de drenaje, lo que reducirá los riesgos de inundaciones en estas áreas.
El Plan Choque forma parte de las acciones preventivas impulsadas por la Municipalidad de Guayaquil y EMAPAG para mitigar los efectos de las lluvias y reducir el riesgo de acumulación de agua en las zonas más vulnerables de la ciudad. Estas medidas son fundamentales para garantizar la seguridad de los guayaquileños durante la temporada invernal y mejorar la calidad de vida de los residentes en los sectores más críticos.
El avance de esta segunda fase del Plan Choque representa un paso importante hacia una Guayaquil más resiliente ante fenómenos meteorológicos extremos. Con estas obras, la ciudad no solo mejora su infraestructura, sino que también se prepara para enfrentar con mayor eficiencia los desafíos del cambio climático y las lluvias intensas que son cada vez más frecuentes en la región.