Guayaquil, un destino turístico próspero y seguro, ha experimentado un notable flujo de visitantes, particularmente en los últimos tres meses del 2023. Con aproximadamente 2.300 turistas de cruceros procedentes de diversas naciones como Canadá, Australia y Estados Unidos, la ciudad ha demostrado su atractivo internacional y su capacidad para cautivar a viajeros de todo el mundo.
La Empresa Pública Municipal de Turismo, Relaciones Internacionales y Cultura ha desempeñado un papel fundamental al acompañar a estos visitantes en todos sus recorridos por los puntos emblemáticos de Guayaquil. Este respaldo ha fortalecido la confianza de los turistas, brindándoles seguridad y tranquilidad mientras exploraban lugares emblemáticos como el Museo del Cacao, el Malecón 2000 o el encantador Cerro Santa Ana.
La presencia constante de la policía turística en cada ubicación visitada ha contribuido significativamente a la sensación de seguridad de los visitantes. Esta iniciativa ha sido clave para promover una experiencia turística placentera y sin contratiempos, reforzando la imagen de Guayaquil como un destino acogedor y seguro para los viajeros internacionales.
El compromiso demostrado por la alcaldía local en respaldar la reactivación económica a través del turismo es admirable. El apoyo brindado a la industria turística no solo ha impulsado la afluencia de visitantes, sino que también ha generado un impacto positivo en la economía local. La colaboración entre las autoridades locales y los servicios turísticos ha sentado un precedente para el desarrollo sostenible del turismo en Guayaquil, fomentando la creación de empleo y el crecimiento económico en la región.
Este enfoque proactivo en el apoyo al turismo no solo beneficia a la ciudad en términos económicos, sino que también consolida su posición como un destino turístico de renombre mundial. La combinación de sus atractivos culturales, la hospitalidad de su gente y las medidas de seguridad implementadas hace de Guayaquil un destino que cautiva y garantiza experiencias memorables a los viajeros.
En resumen, Guayaquil se erige como un destino turístico vibrante y acogedor que valora la seguridad y el bienestar de sus visitantes, impulsando así su reactivación económica y su prominencia en la escena internacional del turismo.
