¡Bienvenido a Rodolfo Baquerizo Nazur y Benjamín Carrión, específicamente en la vibrante doceava etapa de la Alborada! ¡Espera, espera! ¿Oíste ese sonido de «dónde» en la voz? ¡Ah, sí! Aquí estamos en la esquina donde las motos dominan el paisaje urbano, justo en el cruce con la mítica Briz Sánchez. ¿Te suena a «mmm?» en la voz? No te preocupes, todo cobra sentido.
El Briz Sánchez, ese nombre que quizás te haya desconcertado alguna vez. Recuerdo estar en un bus, escuchando a alguien decir «Pilas me deja en el Briz Sánchez», y mi mente curiosa buscaba el lugar sin éxito. ¡Pero espera! En el parabrisas del bus, como una revelación, estaba escrito «Briz Sánchez». Y así, con la música de X-Files resonando en mi cabeza, comenzó mi búsqueda.
Desvelando el misterio, resulta que Briz Sánchez no es una creación de la imaginación de personas mayores de 40 años. ¡No, no! Fue un icónico almacén de telas y ropa que marcó la historia de Guayaquil, cerrando sus puertas hace más de dos décadas. ¡Un lugar entrañable!
En la década de los 80s, Briz Sánchez se convirtió en sinónimo de calidad y variedad en telas. Damasco, gabardina, casimir, lino, tafetán, ¡toda una gama para la confección de sábanas, vestidos, blusas y pantalones! Olvídate de las compras en línea, aquí era retazo de tela, máquina de coser y ¡listo para el próximo evento!
¿Recuerdas los remates y ferias de retazos que emocionaban a los guayaquileños? ¡Eran eventos esperados, promocionados con entusiasmo en los periódicos de la época! Los locales ansiaban encontrar tesoros entre las telas, creando atuendos únicos con ese toque Briz Sánchez.
Así que, si alguna vez un «boomer» te invita a encontrarse en la esquina de Briz Sánchez y te preguntas «¿Dónde es eso?», ahora lo sabes. Es el lugar donde la moda, las telas y los recuerdos se entrelazan en la esquina de la Alborada. ¡Explora la historia y sé parte de la nostalgia que envuelve a Briz Sánchez!