Nos Importas

Ayudemos a Jorge Saa

En un mundo donde las manos que dan también reciben, podemos marcar la diferencia juntos. 🙌🏻🤝🏻

¡Hola! Es un gusto saludarte. En esta ocasión, te invito a conocer una historia inspiradora que demuestra cómo pequeños actos de bondad pueden marcar la diferencia en la vida de alguien más.

Conocí a Jorge, un hombre de 54 años, en una tarde cualquiera. Conversamos un poco y descubrí que muchos vienen a él para que les lustre los zapatos, pero lamentablemente, no contaba con suficientes herramientas para trabajar.

Decidí hacer algo al respecto. Me acerqué a los chicos de H.C. y les pedí que donaran sus zapatos viejos con suelas en buen estado para ayudar a Jorge. La respuesta fue abrumadora. ¡Muchos se sumaron a la causa!

Así que hoy, Jorge recibió una sorpresa: un montón de zapatos para lustrar. Aunque reconoció que sería un día intenso de trabajo, su rostro se iluminó de alegría al ver la muestra de solidaridad de la comunidad.

Me conmovió profundamente su dedicación y esfuerzo, así que decidí retribuirle de alguna manera. Además de pagarle por su labor, le llevé algunos regalitos que tenía en casa y que ya no necesitaba, pero que seguramente él aprovecharía mucho más.

Si tú también quieres ayudar a Jorge, puedes encontrarlo en la calle 6 de marzo y Clemente Válenzuela. Él necesita nuestra ayuda para seguir adelante y llevar una vida digna.

Esta historia es un recordatorio de que juntos podemos hacer un mejor Guayaquil. Cada gesto de apoyo, por pequeño que sea, contribuye a construir una comunidad más solidaria y compasiva. ¡Sigamos extendiendo la mano a quienes más lo necesitan!