La Alcaldía de Guayaquil se embarca en la misión de enriquecer el tejido cultural de las parroquias rurales con el concurso de dibujo y pintura infantil ‘Ponle Pinta a Guayaquil’, celebrado el martes 12 de marzo en Posorja. En este evento, treinta talentosos niños de entre 8 y 12 años se reunieron en la Casa Comunal San José, bajo la coordinación del Gad Parroquial Rural de Posorja, para dar rienda suelta a su creatividad y expresar su visión del patrimonio local.
El monumento seleccionado como fuente de inspiración para esta actividad fue la emblemática figura de la Princesa Posorjá, cuya leyenda precolombina es ampliamente reconocida por los habitantes de la parroquia. Esta figura legendaria ha sido inmortalizada en una estatua ubicada en las calles Juan Colan y Gutiérrez Chaguay, sirviendo como punto de referencia y orgullo para la comunidad local.
La presidenta del Gad Parroquial Rural de Posorja, Alexandra Ayala, enfatizó la importancia de esta iniciativa al señalar que es la primera vez que una entidad gubernamental llega a Posorja con un evento cultural de esta magnitud. En sus palabras, invitó al Alcalde de Guayaquil, Aquiles Alvarez, a continuar apoyando este tipo de propuestas y a mantener viva la atención sobre Posorja, reconociendo así su valor cultural y su contribución a la identidad local.
Los criterios fundamentales para la selección de los ganadores del concurso fueron la creatividad y la innovación, valores que los participantes demostraron en abundancia a través de sus obras. Al finalizar la jornada, se otorgaron premios a los tres mejores trabajos: Nathaly Solórzano, de 12 años, se llevó el primer lugar; Jostin Toala, de 12 años, obtuvo el segundo lugar; y Yireth Sánchez, de 10 años, se hizo acreedora del tercer lugar. Todos los galardonados recibieron kits de pintura como estímulo para continuar desarrollando su talento artístico y explorando su creatividad.
concurso, que tendrá lugar en la Parroquia Rural Progreso en el mes de abril. Esta continuación del evento promete ser otra oportunidad emocionante para que los niños locales se sumerjan en el mundo del arte y la expresión creativa, fortaleciendo así el vínculo entre la comunidad y su patrimonio cultural.