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Fiorella Alvarado, la guayaquileña que da vida a la primera gran exhibición dedicada a André Leon Talley

La guayaquileña Fiorella Alvarado es parte clave en la primera gran exhibición dedicada a André Leon Talley en el SCAD FASH Museum de Atlanta.

La guayaquileña Fiorella Alvarado aporta su talento en el equipo curatorial de la primera gran exhibición dedicada a André Leon Talley.
La guayaquileña Fiorella Alvarado aporta su talento en el equipo curatorial de la primera gran exhibición dedicada a André Leon Talley.

El próximo 16 de octubre de 2025, el mundo de la moda vivirá un acontecimiento histórico: la inauguración en el SCAD FASH Museum of Fashion + Film de Atlanta de la primera gran exhibición dedicada a André Leon Talley, el influyente editor y referente global que transformó el periodismo y la estética de la moda en el siglo XX.

Detrás de la monumental puesta en escena se encuentra la mano experta de la guayaquileña Fiorella Alvarado, quien ha desempeñado un rol fundamental en el equipo curatorial. Durante más de un año trabajó en el proyecto y, en los últimos cinco meses, asumió una responsabilidad decisiva: la preparación y el vestido de alrededor de 100 maniquíes que conforman la muestra en Savannah y Atlanta.

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Fiorella Alvarado aplica la técnica de mannequinage para dar vida a las prendas en la exhibición de André Leon Talley.

Su labor trasciende la simple colocación de prendas. Se trata de un proceso técnico y artístico conocido como mannequinage, que consiste en rellenar, moldear y ajustar cada maniquí hasta lograr que las piezas transmitan la ilusión de estar habitadas. “La idea es que la pieza cobre vida, que hable por sí misma y que el público sienta la presencia de quien alguna vez la llevó”, explica Alvarado, convencida de que la moda se convierte en testimonio vivo cuando las prendas se presentan como extensiones de las historias humanas que las acompañaron.

La magnitud del proyecto es un reflejo de la huella de Talley: más de un centenar de looks históricos, cinco meses de montaje y un equipo internacional que confió en la sensibilidad y técnica de la ecuatoriana para dar coherencia visual a la exhibición. El resultado es una experiencia museográfica que une moda, memoria y patrimonio cultural en un mismo relato.

Para Alvarado, este desafío ha sido también un viaje íntimo. “Tocar, vestir y preservar prendas que marcaron la historia es un privilegio que me recuerda por qué hago este trabajo”, confiesa. Sus palabras condensan la dimensión de un proceso que no solo enaltece la figura de André Leon Talley, sino que también proyecta el talento ecuatoriano en el escenario global de la moda y la museografía.